Orígen de Rosagrís

Revise todos los manuales, diccionarios enciclopédicos y atlas mundiales. No hallará ninguna bandera nacional que entre sus colores ostente ni el rosa ni el gris.

De tal forma, que decidimos confeccionar la bandera Rosagrís, que por otra parte posee el orgullo de ser al mismo tiempo la primera bandera doble faz. De una cara es rosa (el palito o “asta” a la izquierda) y de la otra es gris (el palito o “asta” a la derecha).

Esta bandera es a partir de entonces, la bandera de Rosagris: La Nación que faltaba. Y de hecho, en caracteres dorados, entre una y otra faz, reza: “The country that was needed” en el latín moderno norteamericano).

Esta Nación no posee territorio, ni gobierno ni población. Se trata de una anarquía constitutiva e irrenunciable.

Sin embargo, tiene objetores.

Me explico: Nadie, ni usted, ni su perro ni su locomotor sienten ningún tipo de orgullo por no ser naturales de Suavilandia, Brancosia, Trebuma o Karetchu. En cambio, existimos personas verdadera y fervientemente orgullosas de no ser ciudadanos de Rosagrís. Precisamente estas personas objetoras de su carácter de ciudadanas de Rosagrís, son las únicas de las cuales puede predicarse su carácter de “rosagrises”. De allí que el padre fundador de esta Nación sea el mismísimo Hegel (véase La Lógica).

Rosagrís también posee un héroe nacional: El falso general Trapisondae, quien dirigía un ejército inexistente, con el cual no libró ninguna batalla, en cada una de las cuales no resultó jamás vencedor, pero de cuyas preparaciones hay abundante material estratégico. Posee asimismo un padre espiritual, el falso hermano Lacimo, absoluto no creyente, del que se cuenta que no redactó jamás el sincretismo racionalista que se le arroga, ni indicó en momento alguno no ser quien decía ser, a pesar de lo cual existen numerosas versiones de lo uno y de lo otro.

¿Quiere usted también objetar su ciudadanía?. Sea un objetor más de Rosagrís, un país que sólo posee relaciones internacionales, incluso entre sus propios nacionales, e incluso respecto de cada nacional consigo mismo.

De allí que posea también su goleador: Alexander Barujamen, guardabarreras del equipo, quien equivocó los asaltos y su ubicación en la cancha, así como el juego al que se estaba jugando en el momento en que dejó pasar las pelotas por entre sus manos.

Entregaremos pasaportes a todo aquel que proteste su ciudadanía en el atrio.

domingo, 27 de marzo de 2016

CREER Y REVENTAR (Emisión 37 de Vocerrante)

VOCERRANTE (37)
Creer y reventar
Apertura (Sobre “White ManSleeps II”, por KronosQuartet):
(Andante tranquilo)
“Las palabras vagan, yerran, buscan. Van y vienen por ahí hasta que encuentran un refugio. En las manos, en los ojos, en cualquier cosa que las rescate del olvido.”
                                                                                                                                 (Raúl)
Este es el trigésimo séptimo programa de
VOCERRANTE.
Bienoídosy bienoídas.                                 

Raúl
            Habitamos dulces mentiras. Crueles mentiras.
Dignas ficciones.
Falsas suposiciones.
Presunciones denegadas, suspiradas, insidiosas, fatigadas…
Fantasías  encumbradas.
Fábulas silenciosas.
Creencias ruidosas, fugaces o permanentes.
           
Somos la ilusión de nuestros pasos.
            Arrojados a la intemperie, mientras andamos, nada ni nadie está más lejos de nosotros que nosotros mismos. Para encontrar nuestra espalda hace falta recorrer todo el planeta. 
Creemos en algo porque necesitamos refugios.
            Ya sea la descansada creencia en el destino, la miserable creencia en el infierno, o la menesterosa creencia en el más allá… Siempre que tendemos un brazo sólo hallamos distancia. Sólo hallamos distancia si buscamos llegar a un sitio, dar con un lugar, en algún punto o momento de nuestra vida.
            Es que por más y más territorio que nos circunde, por más vastedades e infinitos, leguas y leguas de silencio…
            Siempre estamos en la orilla.

Daniel
No hay lugar más lejano que el mapa.
Las costas, los meandros, los grupos montañosos, el hilo de los ríos, el ancho de los valles… Sólo tienen sentido como cruces de caminos.
Luego entonces aparece el nombre, y la cita, y el recuerdo.
El lugar sólo aparece en el orden del encuentro, no del hallazgo.
            Del encuentro con otro caminante.

Abrimos la boca para escuchar. No para decir nada.
            Abrimos la boca para encontrar a alguien.
            Y apenas lo hallamos,no teniendo nada en común, porque ambos venimos de distintos desiertos, de distintos destierros, nos damos una historia.

                                                                                                                                 Raúl
            Y al contarnos una historia nos hacemos conocidos.
            Nos volvemos comunicantes.
            Nos hacemos comprensibles.
                                                           Conmensurables.
            Afines.

                                                                                                                                 Daniel
            En la lógica de la comunicación, primero es el relato, luego los nombres, luego la abstracción o el secreto.
            Las primeras palabras se dicen a viva voz. Porque tratan de hacer que el otro al que van dirigidas… vibre, se sacuda, suene el también con ese viento articulado de cuerdas.

                                                                                                                                 Raúl
            Por el contrario, en la lógica del poder, primero es la abstracción o el secreto, luego el nombre, y más tarde el relato.
            Porque una a una las escenas, los recuerdos, las faenas de la lucha se van olvidando, cristalizadas, inmovilizadas en normas.
            Porque uno a uno los quehaceres de todos cuantos intervienen en la confección de un alimento, se van ignorando, emprolijados en cajones y canastas.
            Porque uno a uno los oficios de todas las manos que trabajan en un fin, se van desmenuzando, desdibujando, desvaneciendo, optimizados por la marca del producto.
            Porque las razones del poder ni siquiera exigen ser expuestas, explicadas o siquiera discutidas, y se van normalizando, naturalizando, sistematizando e instituyendo, exaltados por la eficacia de la gestión.

                                                                                                                                 Daniel
            Y con eso, la palabra, el gesto, el viento articulado de las cuerdas, que alguna vez pudo servir como reconocimiento, sus sucesivos despojamientos de piel, de calor, de vida, de carne, acaban externándonos, cosificándonos, apartándonos, escindiéndonos.

                                                                                                                                 Raúl
            Cocer sin fuego.
            Amar sin compromiso.
            Decidir sin riesgo.
            Gobernar sin pasado.
            Imprimir palabras que no salen de la boca.
            Palabras que no buscan vibrar, hacer sonar un cuerpo.
            Sino precisamente silenciarlo.
            Volverlo de una tiza sólida y apelmazada.
            Que no tenga dentro ni fuera, ni cuerdas vibradoras ni caja de resonancia.       
                                                                                                                                 Daniel
Opacar todos los sonidos, como si hubieran rellenado con cemento todo el interior de las campanas.
De forma tal que todo signo se acomode a un solo cuento.
            Que todos los deseos se amolden a una sola satisfacción.
            Que todas las palabras nombren exactamente las mismas cosas.
Que todas las cosas sean una sola institución.
            Que no haya otra fantasía que la de llegar a ser como el que manda.
            Y en esa identificación, envidiarlo, respetarlo y venerarlo.                                                                                                                        
                                                                                                                                  Raúl               En el afán de quitarnos todo, aún también se apoderan del aire de la palabra.
            Y con el aire de la palabra pronuncian “belleza” y debemos representarnos a la actriz candente de la última película de moda; pronuncian “verdad” y sólo debemos atenernos a los resultados de una prueba en un juicio criminal; pronuncian “historia” y sólo debemos considerar cosas viejas, superadas, vencidas o deshechas; pronuncian “futuro” y sólo debemos esperar llegar a ser como ellos son ahora. Por más que el ser ahora de ellos dependa en buena parte del no ser de tantos otros
            En épocas de abigarramiento comunicacional, se construye una máquina de compresión, de saturación y de equivalencias, donde nada ni nadie puede decir otra cosa que lo que se espere oír.

                                                                                                                                 Daniel
            En tiempos de innegable abundancia, donde miles de palabras, signos y maneras de decir y transmitir se propagan todo el tiempo desde un punto al otro del espacio; donde miles y miles de billetes pueden destinarse a los asuntos más suntuarios como orinales de oro, los dividendos de un futbolista, los placebos de un laboratorio, las islas artificiales en forma de planisferio de la costa de Dubai… En tiempos de innegable abundancia, donde al menos la tercera parte del dinero mundial no tributa ningún tipo de impuesto… .
Sólo se generan faltas, deudas, ausencias y desprecios.

                                                                                                                                 Raúl
            Tecnologías del yo, o lo que es lo mismo, de la soledad; éticas de la distinción, o lo que es lo mismo, del distanciamiento; industrias de la publicidad, o lo que es lo mismo, de la producción de escasez; ciencias de la empresa, o lo que es lo mismo, de la gerenciación de las relaciones humanas; periodismo de la noticia, o lo que es lo mismo, de la falta de sustrato; religiones de autoayuda, o lo que es lo mismo, del egoísmo; políticas de resignación, aceptación y consuelo, o lo que es lo mismo, de lo mismo…
Todo ello hace perder de los cauces de la narración, las vías de la narración, los senderos de la narración. Aquello que nos contamos para saber de nosotros. Aquello que nos contamos para que vaya circulando el hilo de nosotros, en un tejido infinito, que nos encuentre en un lugar que fundemos a tal efecto.

Daniel
Disciplinas promovidas que generan ignorancia; industrias celebradas que producen escasez; economías autorizadas que multiplican el hambre. Estrecheces de la comunicación que generan distanciamiento; formas de conciencia que te vuelven inconsciente; visiones de lo real sin siquiera simulación de consistencia…
 Vivimos una época paradójica.

                                                                                                                      Raúl
            Fïjese que dos de las palabras más usadas en cualquier producto o servicio, de cualquier naturaleza, son “easy” y “fast”… Fácil y rápido.
            Nunca el mundo fue más complejo y nunca tuvimos menos tiempo para estudiarlo.

                                                                                                                      Daniel
            Cuando el encuentro no es con un otro, las palabras se encierran sobre sí, y continúa nuestro cada vez mayor letargo en el desierto.

                                                                                                                                  Raúl
            Imagine la noche oscura en la que Tycho Brahe identificaba a una estrella. La anotaba puntillosa y detalladamente en su cuaderno, haciendo constar sus movimientos aparentes.       
            Pues bien, hasta que dos, por lo menos dos honrosos estudiantes no coincidieron en su mirada con ella, y a través de ella, con la mirada de Tycho Brahe, esa estrella podía tener nombre, pero no podía nombrarse.

                                                                                                                                 Daniel
Por lo que el ansia. El ansia es la única verdad de estas palabras. Que acuden desde el aire para alcanzar alguna boca.

Separador
                                                                                                                                  Daniel
“Signo es cualquier cosa que pueda considerarse como sustituto significante de cualquier otra cosa. En cualquier otra cosa no debe necesariamente existir ni debe subsistir de hecho en el momento en que el signo la represente. En ese sentido, la semiótica es, en principio, la disciplina que estudia todo lo que puede usarse para mentir.
“Si una cosa no puede usarse para mentir, en ese caso tampoco puede usarse para decir la verdad: en realidad no puede usarse para decir nada.
“La definición de ‘teoría de la mentira’ podría representar un programa satisfactorio para una semiótica general"
Umberto Eco, “Tratado de Semiótica General”.           

                                                                                                          Raúl
Hablemos entonces de las ciencias fáciles. Las que ni tocan, ni elaboran, ni precisan, ni observan, ni analizan.
Las ciencias que dejan todo donde está.
Sin ver que dejar todo donde está es un modo de intervenir en ello.
Las ciencias sin preguntas. Sin molestias, rebeldías o preocupaciones.
Las ciencias fáciles en las que nos piden creer a fin de no tener que demostrarnos nada.
Así ciertas teorías económicas, tan eficaces para prever lo que ocurrió; ciertas certidumbre políticas, tan eficientes para demostrar lo que no ocurrirá, ciertas expresiones de las ciencias exactas, tan proclives a abstraerlo todo...
Las ciencias fáciles, en definitiva, que aún persisten en la ingenuidad de pretender explicarlo todo, entenderlo todo, abarcarlo todo, a fin de que la técnica derivada de ella, erigida sobre ella, lo domine todo. Incluso a la ciencia.
Ya que no habría otro objetivo en la ciencia que el objetivo de dominio.
Y por sobre todas las técnicas, la ciencia fácil por excelencia, la misma ciencia del dominio conocida bajo el nombre de una práctica:
El management.

Daniel
.”El management es un saber, el saber del poder sin nombre que se desencadena sobre el planeta. Este poder anuncia el reinado de la gestión.
“Management es hoy una palabra sin patria y que quiere decir todo. Es una palabra muy vieja, de origen a la vez francés, inglés e italiano; una mezcla de la tradición europea. Habla de la casa, de la familia, de los enseres domésticos, pero también de las ceremonias o de la manera de adiestrar a los caballos del picadero.
“El management es un instrumento comparable al ejército y a las Administraciones de ayer. Involucra a los individuos según la lógica de las cuatro funciones que resumían antaño la tarea militar: organizar, coordinar, mandar, controlar.” (…)
“Esta contabilidad de cifras sin rostro es un oscuro acontecimiento producido en la civilización, un drama sin palabras (…)
“Tan opaca como el destino en la tragedia antigua, la evolución que llevó a la gestión de todo es un rodillo compresor. Rompe, tritura, a las civilizaciones debilitadas o rebeldes. Aplasta el material humano para administrar sus fragmentos”. (…)
“Hoy ha aparecido la religión de la empresa: todo desemboca en la empresa y todo procede de ella.”
Pierre Legendre, “Dominium Mundi”.

Primer Tema: Only an expert – Laurie Anderson
Lyrics to Only An ExpertNow only an expert can deal with the problem
Because half the problem is seeing the problem
And only an expert can deal with the problem 
Only an expert can deal with the problem

So if there's no expert dealing with the problem
It's really actually twice the problem
Cause only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

Now in America we like solutions
We like solutions to problems
And there's so many companies that offer solutions
Companies with names like Pet Solution
The Hair Solution. The Debt Solution. The World Solution. The Sushi Solution.
Companies with experts ready to solve the problems.
Cause only an expert can see there's a problem
And only an expert can deal with the problem
Only and expert can deal with the problem

Now let's say you're invited to be on Oprah
And you don't have a problem
But you want to go on the show, so you need a problem
So you invent a problem
But if you're not an expert in problems
You're probably not going to invent a very plausible problem
And so you're probably going to get nailed
You're going to get exposed
You're going to have to bow down and apologize
And beg for the public's forgiveness.
Cause only an expert can see there's a problem
And only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

Now on these shows, the shows that try to solve your problems
The big question is always
How can I get control?
How can I take control?

But don't forget this is a question for the regular viewer
The person who's barely getting by.
The person who's watching shows about people with problems
The person who's part of the 60% of the U.S. population
1.3 weeks away, 1.3 pay checks away from homelessness.
In other words, a person with problems.
So when experts say,
Let's get to the root of the problem
Let's take control of the problem
So if you take control of the problem you can solve the problem.

Now often this doesn't work at all because the situation is completely out of control.
Cause only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

So who are these experts?
Experts are usually self-appointed people or elected officials
Or people skilled in sales techniques, trained or self-taught
To focus on things that might be identified as problems.
Now sometimes these things are not actually problems.
But the expert is someone who studies the problem
And tries to solve the problem.
The expert is someone who carries malpractice insurance.
Because often the solution becomes the problem.
Cause only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

Now sometimes experts look for weapons.
And sometimes they look everywhere for weapons.
And sometimes when they don't find any weapons
Sometimes other experts say,
If you haven't found any weapons
It doesn't mean there are no weapons.

And other experts looking for weapons find things like cleaning fluids.
And refrigerator rods. And small magnets. And they say,
These things may look like common objects to you
But in our opinion, they could be weapons.
Or they could be used to make weapons.
Or they could be used to ship weapons.
Or to store weapons.

Cause only an expert can see they might be weapons
And only an expert can see they might be problems.
Cause only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

And sometimes, if it's really really really hot.
And it's July in January.
And there's no more snow and huge waves are wiping out cities.
And hurricanes are everywhere.
And everyone knows it's a problem.
But if some of the experts say it's no problem
And other experts claim it's no problem
Or explain why it's no problem
Then it's simply not a problem.
But when an expert says it's a problem
And makes a movie and wins an Oscar about the problem
Then all the other experts have to agree that it is most likely a problem.
Cause only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

And even though a county can invade another country.
And flatten it. And ruin it. And create havoc and civil war in that other country
If the experts say that it's not a problem
And everyone agrees that they're experts good at seeing problems
Then invading that country is simply not a problem.
And if a country tortures people
And holds citizens without cause or trial and sets up military tribunals
This is also not a problem.
Unless there's an expert who says it's the beginning of a problem.
Cause only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

Only an expert can see there's a problem
And see the problem is half the problem
And only an expert can deal with the problem
Only an expert can deal with the problem

Acabamos de escuchar “Only an expert”, de y por Laurie Anderson.
                                                                                                                      Daniel
Cuando John de Mandeville escribía su “Libro de las Maravillas”; repleto de animales fantásticos, dragones, sátiros, serpientes que prueban si los niños son o no hijos legítimos, bandadas de golondrinas que llevan todas ellas una rama de olivo en el pico, el ave fénix que renace de sus cenizas; tipos de humanos como el esciápode, de una sola pierna pero enorme, con la que se tapan la luz del Sol, los que no tienen cabeza  y tienen dos ojos en la espalda y la cara en medio de los pechos, los que no tienen boca ni narices y en lugar de boca tienen dos agujeros muy pequeños, los que no tienen lengua porque no hablan, o con cuatro ojos, gigantes, o con el cuello tan largo como el de una grulla; árboles que hacen harina, vino y miel… no lo hace como un mitógrafo o recopilador de historias, sino como un cronista. Y en todos los casos despacha sus maravillas indicando ser verdaderas y comprobadas.

Raúl
            Mandeville podía dar cuenta de todas esas criaturas y sucesos fantásticos, porque su descripción coincidía con el sentido común de su época. Podía ser entendido desde la cosmovisión de sus contemporáneos.
            Estela Pérez Bosch, catedrática en filología de la Universidad de Valencia, llama la atención respecto a la edición y distribución conjunta de este “Libro de las Maravillas” de Mandeville y del “Libro de las Maravillas” de Marco Polo, viajero real, de quien por otra parte, toma su título, por cuanto el primero debió circular como obra de fantasía, en cambio el segundo era tenido por la crónica de un viaje real. Así, expone que “el fingido viaje de Mandeville llegó  a ser una obra muy apreciada y valorada como una especia de ‘geografía al uso’. Fue bienvenida tanto entre viajeros y peregrinos con afán de conocimiento práctico, como entre eruditos e intelectuales más inclinados a un conocimiento teórico del mundo.”
            El efecto real era posible merced a su engarce perfecto con lo que se tenía por real por parte de aquellos peregrinos, eruditos e intelectuales. En contraste, indica la filóloga: “Marco Polo es el primer viajero real que describió y atravesó Asia, rebasando incluso los límites conocidos, que cruzó las estepas mongolas y los desiertos de Persia hasta llegar a la China; precisamente por eso, por desatender los límites concebibles para tradición culta y escrita, el relato de sus periplos fue leído como un conjunto de fábulas”.

                                                                                                                                 Daniel
            ¿Qué es una mentira, entonces, qué es un engaño?
            Mentira es aquella afirmación que haciendo uso de un código aceptado, finge o funge algo que no es.
            ¿Pero es mentira decir algo que no es cuando está siendo a pesar de no saberlo?
            ¿Es mentira decir algo que creemos que así es, cuando no lo es, al menos de esa forma?
            Hacen falta por ende tres elementos para la mentira: El factor objetivo de que la cosa o el hecho no sean o no hayan sucedido tal como se los representa en una afirmación; el factor subjetivo, de que quien realiza esa afirmación conozca esta disociación con lo real, sepa que está mintiendo; y por supuesto también el factor de sustento, el código común, que lo haga pasible de ser.
            Engaño, por su parte, es un paso más en esa composición: Un engaño es ya la manipulación del código. Cuando el mismo índice de verosimilitud se encuentra trastocado, a sabiendas de su falsedad.
            De este modo llegamos a la proliferación de la ciencia fácil, de la ética fácil, del gobierno fácil, como consecuencia de la manipulación del código de lo real.
            Saber el modo en que podemos ser engañados, saber los modos en los que hemos sido engañados eficazmente, nos marca el daño que pueda tener nuestro sistema de referencias, el daño que pueda tener nuestro código de consenso.
            En “El impostor inverosímil Tom Castro”, Jorge Luis Borges relata  un engaño basado en el trastocamiento del código de reconocimiento de una persona, en orden a la voluntad de otra de no aceptar la verdad.

                                                                                                                      Daniel
“Tichborne era una esbelto caballero de aire envainado, con los rasgos agudos, la tez morena, el pelo negro y lacio, los ojos vivos y la palabra de una precisión ya molesta; Orton era un palurdo desbordante, de vasto abdomen, rasgos de u a infinita vaguedad, cutis que tiraba a pecoso, pelo ensortijado castaño, ojos dormilones y conversación ausente o borrosa. Bogle inventó que el deber de Orton era embarcarse en el primer vapor para Europa y satisfacer la esperanza de Lady Tichborne, declarando ser su hijo. El proyecto era de una insensata ingeniosidad. Buscó un fácil ejemplo. Si un impostor en 1914 hubiera pretendido hacerse pasar por el Emperador de Alemania, lo primero que habría falsificado serían los bigotes ascendentes, el brazo muerto, el entrecejo autoritario, la capa gris, el ilustre pecho condecorado y el alto yelmo. Bogle era más sutil: hubiera presentado un káiser lampiño, ajeno de atributos militares y de águilas honrosas y con el brazo izquierdo en un estado de indudable salud. No precisamos la metáfora; nos consta que presentó un Tichborne fofo, con sonrisa amable de imbécil, pelo castaño y una inmejorable ignorancia del idioma francés. Bogle sabía que un facsímil perfecto del anhelado Roger Charles Tichborne era de imposible obtención. Sabía también que todas las similitudes logradas no harían otra cosa que destacar ciertas diferencias inevitables. Renunció, pues, a todo parecido. Intuyó que la enorme ineptitud de la pretensión sería una convincente prueba de que no se trataba de un fraude, que nunca hubiera descubierto de ese modo flagrante los rasgos más sencillos de convicción. No hay que olvidar tampoco la colaboración todopoderosa del tiempo: catorce años de hemisferio austral y de azar pueden cambiar a un hombre.
“Otra razón fundamental: los repetidos e insensatos avisos de Lady Tichborne demostraban su plena seguridad de que Roger Charles no había muerto, su voluntad de reconocerlo.”
            Jorge Luis Borges, de “La Historia Universal de la Infamia”, “El impostor inverosímil Tom Castro”.

                                                                                                                                 Raúl
¿Pero qué ocurre cuando el engaño es colectivo?. Nos habla acerca de un trastocamiento del código social de reconocimiento, no del meramente individual. Robert Proctor, epistemólogo de la Universidad de Stanford, acuñó muy recientemente (año 2005) el término “agnotología” para referirse al estudio del modo de construcción social de la ignorancia.
Prestar atención a los casos de engaños colectivos exitosos, puede darnos pistas acerca de nuestros códigos de reconocimiento, pretendidamente modernos y despojados de intereses.
Un caso de este tipo, es el del increíble, pormenorizado y distinguido caso del “cronovisor”, que movilizó a en la segunda mitad del siglo pasado a por lo menos tres servicios de inteligencia; y el del delirante y tragicómico asunto de los visitantes del planeta “Ummo”, acerca del que todavía se editan libros aún en esta década (uno de ellos, con tirada de miles y miles de ejemplares, de un autor best seller internacional, Juan José Benitez, “El hombre que susurraba a los ummitas”, es del 2007).

            Hablamos del “Cronovisor” y de Ummo.
            Encontramos en ellos paralelismos con las ciencias fáciles, la programación neurolingüística, la cienciología, el éxito de publicaciones como “El Secreto” y una general relajación pública respecto de la prescindencia del trabajo en la generación de valor y en la generación de conocimiento. Las manos quedan relegadas de todas indagación. Sólo la cabeza. La historia es mera imagen o representación. O mero vínculo de autoridad y secretismo. Las dos increíbles sagas se revierten sobre sí mismas y culminan en la aceptación del absurdo como complot, buscando el modo de insistir ad hoc frente a todos los embates de la sensatez.
Las citas del Cronovisor están en http://elojocritico.info/cronovisor-un-fraude-vaticano/, entre otras fuentes.
Las de Ummo, están en http://www.ummo-ciencias.org/. La carta que se lee está en http://www.ummo-ciencias.org/cartas.html
La confesión de Jordán Peña y otros datos escalofriantes relacionados con el fraude se encuentran en http://elojocritico.info/jordan-pena-el-mengele-del-misterio/.

Leer las citas textuales siguientes del mundo del management y la Programación Neurolingüística:

“En ningún momento o lugar he realizado por escrito un afirmación tan arrogante como la que estoy a punto de hacer. No sé si es una buena idea. Creo – tras considerarlo seriamente. Que este es el único camino para que las personas con cargos “junior” hagan las cosas” (PETERS, Tom;: “Triunfar!”, Ediciones Nowtilus S.L., Madrid, 2002, pag. 25) (subrayado en el original).

 “Puesto que está leyendo este libro, usted ha manifestado su vocación incipiente de millonario perezoso.
“Esto es todo lo que necesita para comenzar, la apertura de mente necesaria para poder pensar al menos durante algunos instantes, como un millonario perezoso” (FISHER, Marc: “El millonario perezoso…y El arte de estar siempre de vacaciones”, Editorial AMAT, Barcelona, 2008, pag. 20.

“La mayoría de la gente se maneja en un torbellino de emociones, reaccionando constantemente y procurando allanar disputas y conflictos. Su autocontrol y su autonomía no hará sino enfurecer a los demás. Tratarán de arrastrarlo al torbellino, y le rogarán que tome partido en interminables batallas o que haga de pacificador. Si usted sucumbe a estos emotivos ruegos, poco a poco verá que su mente y su tiempo terminan absorbidos por los problemas de los demás. No permita que la compasión por los otros lo lleve a involucrarse. Es un juego que nunca podrá ganar, pues los conflictos no harán sino multiplicarse.” (GREENE, Robert y ELFERS, Joost : “Las 48 leyes del Poder”, Editorial Atlántida, Buenos Aires, 2006, pag. 205)
 “Lo que llega último permanece grabado en la mente como una especie de signo de exclamación, No hay mejor momento para detenerse y retirarse que después de una victoria.” (Id., pag. 508).

Con una expresa mención respecto de la ausencia de la temática sobre la riqueza financiera y los comportamiento del dinero en el mundo de las inversiones, en la enseñanza formal, comienza el trabajo de KIYOSAKI, Robert T.: “Conspiracy of the Rich – The 8 new rules of Money”, aún en elaboración y del que se encuentra disponible su introducción y primer capítulo en http://www.conspiracyoftherich.com/ (consulta efectuada en febrero de 2009).

“-De verdad crees que trabajar esforzadamente es lo que hace rica a la gente?

 “Por favor, para leer las páginas que siguen, busque un lugar donde esté a solas y nadie lo interrumpa. Suprima todo de su mente, salvo lo que venga leyendo y lo que yo le invitaré a hacer. Olvídese de su agenda, de su negocio, de su familia, de sus amigos. Dirija hacia mí toda su atención y su mente”. COVEY Stephen R.: “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva”, Editorial Paidós, Buenos Aires, 2008, pag. 111).

 “Todos estos triunfadores creían firmemente que conseguirían grandes logros. Todos aquellos que se hicieron ricos estaban profundamente convencidos de que se harían ricos. Y por eso triunfaron”. (FISHER, Mark: “El Millonario Instantáneo”, Ed. Urano, Buenos Aires, 1989, pag. 62).

 “Son ricos y poderosos porque querían ser ricos y poderosos” (ARDEN, Paul, “Usted puede ser lo bueno que quiera ser”, Ed. Phaidon, traducido del inglés por Carme Franch para Equipo de Edición S.L., Barcelona, 2005, pag. 3.)

“Sí, simplemente N-O-H-A-C-E-R-N-A-D-A, pero hacerlo cuando se quiera, con un placer infinito, hacerlo tomándose su tiempo, hacerlo degustando cada instante, porque es un placer poco habitual, mucho mejor en la medida en que hace una eternidad que no se ha probado ese placer, esa delicia, ese privilegio reservado a los niños o.. a los millonarios perezosos: NO HACER NADA.
“Y no sentirse mal por ello…
“Si acaso, sentirse un poco mal por los demás, los pobres (nunca mejor dicho) que no conocen o ya no se pueden permitir esa dicha de la cual se privan por voluntad propia, en el fondo, o por falta de originalidad, por espíritu gregario, porque todos a su alrededor se privan también, en definitiva, y lo soportan mal que bien…” (FISHER, Marc: “El millonario perezoso… y El arte de estar siempre de vacaciones”, Editorial AMAT, Barcelona, 2008, pag. 196).

 “Qué es?” – era la pregunta que le formulábamos Mike y yo con frecuencia: “¿Qué es el dinero si no es real?
            “-Es lo que hemos acordado que sea – decía mi padre rico. El activo más poderoso con que contamos es nuestra propia mente. Si es adiestrada correctamente , puede crear una enorme riqueza en lo que parecer ser un instante; una riqueza que superaría los sueños de reyes y reinas de hace 300 años”. (KIYOSAKI, Robert: “Padre Rico, Padre Pobre”, Ed. Aguilar, Buenos Aires, 2005, pag. 145).

““LA VIDA NO TIENE QUE SER GANADA PORQUE ESTÁ GANADA DESDE QUE NACEMOS”.
“Porque tú ya lo has hecho. ¿El qué? Te preguntarás… Pues ya has empezado a andar. No sé si te habías dado cuenta o no… No sé si hace mucho o poco que estás andando. Pero no hay duda de que estás en el camino. En tu camino. Incluso aunque no lo parezca. Lo estás. ¿Y sabes por qué?. Porque estás aquí, leyendo esto. Porque este libro ha llegado a tus manos. Y tú has ido leyendo hasta aquí. Buscando respuestas. Respuestas hacia una vida feliz. Buscando la felicidad. Buscando el éxito en tu vida. Buscando darle una dirección y un sentido. Buscándote a ti. ¡PORQUE LLEGAR A TI ES EL ORIGEN DE TODA FELICIDAD!”
(ROVIRA CELMA, Álex: “La brújula interior”, Ed. Urano S.A., Barcelona, 2008, pags. 23 y 102.

 “Mi padre rico creía en el principio que él llamaba KISS (Keep ot Simple Stpid), “Manténlo Sencillo, Estúpido”, de manera que lo expresó con sencillez pura de niños pequeños y eso le permitió crear los sólidos cimientos financieros”: (KIYOSAKI, Robert: “Padre Rico, Padre Pobre, Aguilar, Buenos Aires, 2005, pag. 84).

“Era consciente de haber aprendido algo útil de sus amigos ratones Fisgón y Escurridizo, algo importante sobre seguir adelante. Ellos procuraban que la vida fuese simple. No analizaban en exceso ni supercomplicaban las cosas. En cuanto cambió la situación y el Queso cambió de sitio, ellos también cambiaron con el Queso. Eso era algo que nunca olvidaría.
“(…) Se puede ser más consciente de la necesidad de procurar que las cosas sean simples, de ser flexible y moverse con rapidez.” JOHNSON, Spencer: “¿Quién se ha llevado mi queso?”, Ediciones Urano, Barcelona, 2000, pag. 79.

Daniel
El fin del panóptico augura el fin de la era del compromiso mutuo: entre supervisores y supervisados, trabajo y capital, líderes y seguidores, ejércitos en guerra. La principal técnica de poder es ahora la huida, el escurrimiento, la elisión, la capacidad de evitar el rechazo concreto de cualquier confinamiento territorial y de sus engorrosos corolarios de construcción y mantenimiento de un orden, de la responsabilidad por sus consecuencias y de la necesidad de afrontar sus costos”.
BAUMAN, Zygmunt “Modernidad Líquid”", Primera Edición en español – 2003 –).

                                                                                                                                  Raúl
Ya sea la descansada creencia en el destino, la miserable creencia en el infierno, o la menesterosa creencia en el más allá… Siempre que tendemos un brazo sólo hallamos distancia. Sólo hallamos distancia si buscamos llegar a un sitio, dar con un lugar, en algún punto o momento de nuestra vida.
            Es que por más y más territorio que nos circunde, por más vastedades e infinitos, leguas y leguas de silencio…
            Siempre estamos en la orilla.
            Estrechar una mano es el único de modo de llegar al otro lado.    

Cierre
(Sobre “L´inverno” Segundo Movimiento – Antonio Vivaldi, por IlGiardinoArmonico):
(Lento - Grave)

“Siguen vagando las palabras, criaturas del aire, harinas de tiempo, hurgando por las cuerdas, y los labios y la boca, para vibrar de nuevo.”